La hipoteca multidivisa tuvo bastante acogida entre colectivos profesionales de ingresos fijos garantizados como pilotos, bomberos o controladores aéreos.
La acogida fue especialmente relevante en Cataluña donde se comercializaron más de 10.000 hipotecas en divisa extranjera. Le siguen Madrid, con 9.500, y Andalucía, con 9.000.
Ahora los bancos se van a enfrentar a un nuevo aluvión de reclamaciones, pues difícilmente podrán acreditar haber entregado a sus clientes con anterioridad a la firma del contrato documentación lo suficientemente transparente e informativa en la que advirtieran de todos estos riesgos.
Gracias al Supremo, los afectados por hipotecas multidivisa opacas pueden aspirar ahora a ver recalculado el crédito como si hubiera estado emitido en euros desde su origen, multiplicando la amortización de capital hecha y recuperando el dinero pagado de más.